Hamburguesas. I love burgers. Solas, sin pan y sin nada, aunque un día seré una tía arriesgada y les pondré una rodaja de tomate por encima. Sobre todo a estas, que son jugosas (no las recalentéis mucho, que si no pierden la jugosidad). Porque las haré otra vez, pero voy a ver si puedo veganizarlas, porque la verdad es que el invento del huevo no le aporta nada, me temo. En sabor, digo. La función supongo que la hará, la de amalgamar los ingredientes. Pero, como siempre, muy amalgamados no me quedaron porque se me deshicieron todas. ¿Cuál fue el truco? Pues nada, cuando vi que se me deshacían, ya en la plancha, lo refreí todo muy bien, hice una nueva masa con aquello y cogí un aro de emplatar, puse la masa en el aro una vez cocinada, le di forma de hamburguesa y la congelé. Para comerla, la descongelé en el microondas. Creo que la próxima vez las pondré en un plato, congeladas (para que no se deshagan, que no me veo quitando papel film o de aluminio a una masa pegotosa) y las dejaré descongelar y les daré un meneo de calor en el microondas y ya está. Porque la parte del centro estaba jugosísima, pero los lados estaban más secos que el ojo la Inés, que no sé quién fue, pero debió ser tuerta. El sabor, riquísimo. De verdad.
La receta está cogida de la página de Whole Living. Las medidas son en tazas americanas. Sí, apunté las cantidades, pero tiré el papel. Soy así. Cuando las haga otra vez y las veganice, actualizaré con las medidas en su sistema métrico. Realmente, da lo mismo, porque lo que importa son las proporciones, así que podéis coger cualquier taza y ya está…
Ingredientes:
- 2 tazas de garbanzos cocidos y escurridos
- 1 taza de arroz integral cocido
- 1 chalota, picada
- 1 diente de ajo picado
- 2 cucharadas de perejil fresco picado
- sal gruesa al gusto
- pimienta negra al gusto
- 1 huevo grande batido, o su sustituto
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Preparación:
Una vez cocidos los garbanzos y el arroz integral, machácalos con un tenedor o un machador de patatas hasta que hagas una pasta. Añade la chalota, el ajo y el perejil y sazona con sal y pimienta. Agrega el huevo y mezcla bien. Haz hamburguesas (a mí me salieron cinco bien grandes, con el aro grande de emplatar y un grosor buenecito: el típico grosor de una hamburguesa, vamos).
Calienta aceite de oliva y cocina cuatro minutos por cada lado. Sirve como desees. En la receta original, la espolvorean con mostaza en grano machacadita, agregan cebolla roja y pimiento rojo, envuelven en una hoja de lechuga y sirven. Yo las tomo solas solísimas.
Como ya he contado, una vez puestas en la sartén, aquello se deshacía que daba gusto. Supongo que hay que enfriar la masa, cosa que yo no hice (lo siento: estoy adentrándome en el mundo de las hamburguesas vegetales, no conozco los trucos). O apelmazarla aún más con algo (el huevo creo que fue el fallo, fíjate: demasiado líquido). Pero da igual. Como se me apelotonó todo, lo freí bien y luego lo congelé dándole forma. Me da lo mismo, el resultado es genial y está muy rico, así que no me importa formar las hamburguesas a priori o a posteriori. Qué se le va a hacer.
Pues yo sustituiria el huevo por «crema de garbanzo molido» al igual que hago con la tortilla de patatas.
Anda. ¿Como el hummus? ¿Trituro los garbanzos? Esa es buena idea, es espeso…
Buena idea. Una sugerencia en caso de que la mezcla quede muy suelta es aumentarle avena o también hojuelas de granos andinos (quinua o kiwicha) hasta que tenga una consistencia adecuada para darles forma. Por otro lado, como alternativa para la cocción, las hamburguesas se pueden cocinar al horno, ya que al freirlas absorven bastante aceite y eso no es muy saludable.
Esta hamburguesa no la he vuelto a hacer porque lleva huevo. 🙂 Antes seguía las recetas y ahora ya sé cómo tiene que quedar la masa… 🙂 Se compacta con harina, con avena, con pan rallado… y usaría lino molido en agua para sustituir al huevo. De todos modos, tengo recetas de hamburguesas mucho más ricas en el blog!