La coliflor y el brócoli, que son primos hermanos y que me encantan los dos, con esta salsa quedan muy ricos para acompañar una pasta. También salen más o menos picantes, sobre todo por el pimiento rojo, que no es más que copos de chile, así que podéis echarle menos, cosa que yo haré sin duda la próxima vez que repita. Sí, parece que solo como pasta últimamente… Tengo que vencer mi pereza natural hacia otros ingredientes que tardan más en hacerse… o dejar el plato hecho para calentarlo al día siguiente… (sí, estoy pensando en las patatas, por ejemplo).
Receta extraída de aquí.
Para 3 raciones
Ingredientes:
- 180 gramos de pasta corta (macarrones, conchas o lo que sea, sin gluten si es para celíacos)
- 1 cabeza de brócoli (como 450 gramos) cortada en pequeñas flores y los tallos reservados para otro uso
- 1 cabeza de coliflor (como 450 gramos) cortada en flores
- 1 taza (250 mililitros) de leche vegetal sin endulzar (la receta original pide 2, pero queda mucha salsa)
- 6 dientes de ajo, pelados y majados
- 1 cucharada de albahaca seca
- 2 cucharaditas de orégano seco
- 1/2 cucharadita de copos de pimiento rojo, o al gusto
- 1/8 cucharadita de pimienta negra al gusto
- 5 cucharadas de levadura de cerveza
- 2 cucharaditas de Maizena (almidón de maíz o de patata)
- 1 y 1/2 cucharaditas de sal o al gusto.
Preparación:
Lleva un bol grande de agua a hervir y cocina la pasta. Cuando la pasta esté, escúrrela pero con cuidado de reservar una taza del líquido de cocción. Luego escurre la pasta bien y vuelve a ponerla en la olla o en una fuente de servir.
Mientras la pasta se está cociendo, cuece al vapor los vegetales hasta que estén tiernos.
Haz la salsa mientras la pasta y los vegetales cuecen. Mezcla en un cazo la leche, el ajo, sal y pimienta. Llévalo a ebullición a fuego medio-alto, reduce el calor al mínimo y cocina, removiendo frecuentemente durante tres minutos. Agrega 1/2 taza (115 gramos) del agua de cocción de la pasta y la levadura de cerveza. Disuelve la Maizena en 1/4 taza (55 gramos) de agua fría y agrégalo a la salsa, removiendo bien. Incrementa el calor y cocina hasta que la salsa hierva y se espese ligeramente. Prueba la sazón y rectifícala si es necesario.
Cuando los vegetales estén hechos, agrégalos a la pasta, cubre con la salsa caliente por encima y revuelve con cuidado para que se impregne bien. Si ves que queda muy espeso, agrega un poco del agua de cocción de la pasta y remueve. Espolvorea con más copos de pimiento rojo si quieres y sirve.
Fíjate que he comido de casi todo, pero nunca me había dado por combinar pasta con crucíferas. ¡Va a haber que probarlos! 🙂
Está muy buena. Yo creo que con garbanzos y curry también tiene que estar rico…