
Si vivís en Granada, sabréis que venden muchísimas especias. Y mezclas. Yo, la última vez que estuve allí, visitando a dos de mis mejores amigos (y sus familias) me traje un sinfín de paquetes. Uno de ellos es, simplemente, especias morunas. Como los paquetes son de papel y yo las especias las meto en botes cerrados herméticamente, pues no sé muy bien qué llevan. Pero, como las tengo infrautilizadas porque en mis libros veganos no aparecen por ninguna parte y siempre tengo muuuuchas dudas con las combinaciones de especias, un día de mis vacaciones, que me puse a llenar el congelador como si no hubiera un mañana (claro que, si no hay un mañana, para qué lleno yo el congelador, eh), me dio por «innovar». A ver, yo en la cocina, innovar innovo poco. Pero lo intento. Así que de mis ansias de innovación salieron estas berenjenas a la moruna.
Ingredientes para 4 raciones:
- 2 berenjenas hermosas, sin el rabito y cortadas por la mitad y luego a medias lunas
- 1 cebolla grande, pelada y cortada por la mitad y a medias lunas
- 3 dientes de ajo, pelados y picados finamente
- 2 ramas de apio, sin los hilos y picadas finamente
- 2 cucharaditas colmadas de especias morunas
- aceite de oliva (las berenjenas absorben bastante)
- sal al gusto
Preparación:
Calienta una cazuela a fuego medio alto. Agrega 2 cucharadas de aceite. Añade la cebolla y el apio y sofríe, removiendo de vez en cuando, durante 5 minutos.
Ahora, añade el ajo y sofríe unos 30 segundos o así, removiendo. Yo usé la cacerola Le Creuset, que es de hierro vitrificado y es de las mejores compras que he hecho en la vida: como es de hierro, distribuye muy bien el calor y no le hace falta mucha temperatura a la comida para que se haga bien.
Agrega ahora las berenjenas, sala al gusto y dale vueltas. Tenlas así unos 7 u 8 minutos, removiendo de vez en cuando. Luego, tapa la cacerola, pero no del todo, deja una rendija. Y ve comprobando y moviendo de vez en cuando. Hará falta más aceite, fijo, pero yo solo eché un chorreoncito más (no creo ni que llegara a una cucharada).
Cuando las veas casi hechas (es decir, cuando ya no estén blancas y estén blanditas, pero todavía un poco tiesas), agrega las especias morunas y remueve muy bien. Tapa la olla y tenlas unos minutos más. Si ves que se pega todo mucho (y esto vale para cualquier punto de la receta), baja el fuego y listo.
«Mis» berenjenas con «mi» Granada…más o menos esa vista es la que tenía yo desde mi balcón cuando vivía allí…
Qué suertuda!!!
Un platito bien rico.
Busca curris naturales, son un buen filón para utilizar cientos de especias ;-))
Me encantan las especias :-))
Un saludito
¡Me gusta mucho la nueva estética del blog :)! He intentado dejarte comentarios antes pero siempre me da error, a ver si hoy tengo suerte… ^^
Ay, algún día compraré un dominio y alguien me hará un diseño chulo… 🙂
Pero la verdad es que a mí también me gusta más así. Muchas gracias!
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