
He salido del confinamiento con 800 kilos más, una artritis autodiagnosticada (pero que me tienen que diagnosticar oficialmente) y sin haberme cuidado un carajo. Hasta el gazpacho lo he comido de bote. García Millán, exquisito y para un apaño, pero no para todos los días.
Ahora, con mucha calma y tranquilidad, estoy retomando los buenos hábitos. He comenzado, despacito, a hacer deporte; he comprado ropa para el invierno, porque la que tengo no me cabe y habrá que vestirse igual y cocino rudimentariamente (esto quiere decir que cuezo patatas y zanahorias al vapor para ensaladas).
En medio, como proyecto, me he ido leyendo este libro: «Por qué comes como comes«. Es de Victoria Lozada y Carlos Moratilla, nutricionista y psicólogo especializado en trastornos del comportamiento alimentario (TCA) y adicciones.
Comer es, también, un aprendizaje. No todo es comer emocional y de ese tema, que me interesa cada vez más, hablan también en este libro. Creo que se habla mucho de que uno come «porque hay temas no resueltos» y no de ese comportamiento que te hace comer compulsivamente sin razón alguna, como se drogan los yonquis, solo porque te gustan determinados sabores.
Agradezco, además, que no haya frases del tipo «conecta con tu cuerpo», que a mí me ponen enferma. Hay mensajes de las personas que se dedican a trabajar con trastornos alimentarios que a mí me parecen muy paternalistas, muy infantilizadores, cuando la realidad es, más bien, esta: «Mi TCA ocupa el 70 por ciento de mis pensamientos diarios».
Por esas razones adoro este libro.
Nos muestra que comer es un acto que desarrollamos en un determinado contexto, uno distinto cada vez; que sí hay un comer emocional que se aprende; cómo se generan y mantienen los hábitos y por qué no podemos parar de comer (o de pensar en comida o de reprimirnos para no comer, que a mí me parece que tengo con la comida la misma relación que tenía con el tabaco… cuando estaba dejando de fumar, con la diferencia de que no puedo dejar de comer). Habla de por qué fracasan las dietas y del perfeccionismo, la rigidez, el autocontrol y la conducta alimentaria.
Es un libro para leer despacito e ir apuntando conceptos y reflexiones: ¿Por qué yo como así? ¿Qué puede haber influido en mi infancia para que me gusten unos sabores y no otros? ¿Es mi rigidez la manera más rápida de tener atracones? A quién no le suena eso de: pues ya que me he saltado la pauta a la hora de comer, porque me coma estas patatas ahora no pasa nada, porque total, ya la he cagado antes. Si analizo mis contextos y mi modo de reaccionar, ¿podría aprender a detectar cuál es el momento en que voy a empezar a comer de más y a poner remedio? ¿Sería capaz de modificar mi comportamiento?
Si veis que no podéis solos, buscad un psicólogo especializado en TCA.
Enlaces:
Por qué comes como comes. Este es en un enlace a una librería, para pedir que compréis el libro en librerías, que Amazon ya es muy rico. Si lo queréis ver en la página de la editorial, pinchad aquí. Jana Fernández realizó un podcast con ellos dos, que podéis escuchar aquí.
Páginas y redes de Victoria Lozada: Web, Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn, Pinterest, YouTube.
Páginas y redes de Carlos Moratilla: Movêre Psicología, Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIin.
Programa de Las Perras de Pavlov con Carlos Moratilla hablando sobre drogas.