Callos veganos. El clasicazo

Callos veganos
Callos veganos con su hojita de hierbabuena

No sé cuántas recetas habrá de callos veganos en la red, pero no me importa. Era la primera vez que los hacía y se han transformado en mi nuevo plato de garbanzos favorito. Yo solo he probado los callos una vez, en casa de Jandro, con Jandro (1), y me parecieron riquísimos: «Qué bien cocinas, coño», le dije a Mariana. Ella se rió: «Son de lata». Seguían estando ricos y Mariana sigue siendo una magnífica cocinera.

Muero por ir a Granada.

Y a Cáceres y a Badajoz. Por no tener que salir con unos guantes que se arrugan y se enredan en todas partes, con las bolsas del súper bien visibles por si acaso, por no notar que sudo todo el rato con la mascarilla puesta. Por poder sentarme en alguno de los quioscos de la plaza de España de Mérida repleta de gente.

Mientras tanto, como callos.

Exquisitos de verdad

Ingredientes para 3 raciones:

  • 450 gramos de garbanzos cocidos
  • 250 gramos de cebollas peladas y cortadas en trozos de 3 o 4 cm.
  • 500 gramos de setas de cardo o setas ostra frescas limpias y cortadas a tiras
  • 100 gramos de tomate frito
  • Una pimienta de cayena seca entera
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 dientes de ajo
  • 40 gramos de aceite de oliva
  • 1 cucharadita de pimentón agridulce de La Vera
  • 300 ml de caldo de verduras
  • 1/2 cucharadita de comino molido
  • 2 pellizcos de pimienta molida
  • 1 rama de hierbabuena, solo las hojas, picadas

Preparación:

En Cook Expert:

Pon, en el vaso, la cebolla, el ajo y el aceite y pica tres segundos a velocidad 14. Las velocidades van de cinco en cinco segundos, así que párala cuando en la pantalla ponga 02.

Ahora, sofríe 10 minutos a 120º C y velocidad 1A.

Pon la mariposa.

Añade las setas y el pimentón y rehoga 2 minutos a 100º C y velocidad 3.

Pon el tomate frito, 2 cucharadas soperas de garbanzos, el caldo, la cayena, el comino, la sal y la pimienta. Programa 10 minutos a 100º C y velocidad 3.

Quita la mariposa.

Añade el resto de los garbanzos y programa 10 minutos a 120º C y velocidad 0. Quita el cubilete. Esto sirve para reducir la salsa.

Sirve con la hierbabuena picada.

Tradicional:

Pon una olla a fuego medio y deja que se caliente mientras picas las cebollas a cuadraditos y el ajo en trozos pequeños. Añade el aceite, deja que se caliente también y sofríe la cebolla y el ajo 10 minutos. Remueve de vez en cuando.

Añade las setas y espolvorea el pimentón. Sofríe 10 minutos, removiendo de vez en cuando.

Agrega el tomate frito, los garbanzos (todos), la cayena, el caldo, el comino, la sal y la pimienta. Deja hervir durante 10 minutos.

Ante de servir, incopora la hierbabuena y a comer.

Enlaces del blog:

(1) Jandro era uno de esos amigos que son hermanos. He hablado de él muchas veces en este blog, aquí.

Callos veganos. El clasicazo

Pasta korma

Escribo esto mientras espero que den las nueve y cuarto para irme a Sevilla a celebrar una boda que ya fue. Tengo que leer dos libros que presento (de Antonio Muñoz Molina, con él: quería una charla; y de José Ramón Alonso de la Torre), he de preparar una entrevista sobre un tema del que no sé absolutamente nada (el castigo como procedimiento de cambio: sí sé: lugares comunes) y me he levantado pensando en que desconozco cuándo comenzamos a correr tanto. He trabajado muchas más horas en mi vida. He tenido jornadas laborales kilométricas y explotadoras, como tantos de nosotros. Ahora, con un sueldo digno, con ocho horas en la radio, con más tiempo libre del que he disfrutado jamás, ando más estresada que nunca. No voy a decir que con más ansiedad: la ansiedad ha sido una constante en mí desde que recuerdo.

Pasta Korma
Pasta Korma

La pasada Semana Santa rescaté algunos de los libros de cocina omnívora que tengo, que son muchísimos, para veganizar algunos platos. Los de Jamie Oliver son sencillos y en «La escuela de cocina» hay recetas de pastas típicas de la cocina india que yo he adaptado porque, si le meto guindillas, me pongo malísima. Si queréis que pique más, añadid una o dos guindillas a la pasta y listo. Con ella haremos korma de soja texturizada, pero la podéis usar para verduras también, con leche de coco. O lo que se os ocurra, que hay por el mundo gente mucho más creativa que yo. También ando viendo todos los documentales de cocina y veganos de Netflix y añadiéndolos a mi lista, para inspirarme. Y para intentar que haya menos residuos en mi vida. Complicado, en el mundo en el que vivimos, pero algo se podrá hacer mientras esperamos que los gobernantes se pongan las pilas. Aunque sea una gota. Una gota siempre es mejor que nada.

Pasta Korma
Pasta Korma

Ingredientes:

  • 2 dientes de ajo
  • Un trozo de jengibre pelado de unos 2 cm.
  • 1/2 cucharadita de cayena en polvo
  • 1 cucharadita de garam masala
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 2 cucharadas de aceite de cacahuete
  • 1 cucharada de concentrado de tomate
  • 3 cucharadas de coco deshidratado
  • 2 cucharadas de harina de almendras (o un puñado de almendras, si no tenéis harina)
  • un manojito de cilantro
  • 2 cucharaditas de semillas de comino
  • 1 cucharadita de coriandro (cilantro en semillas)

Los ingredientes de la pasta korma en el robot
Los ingredientes de la pasta korma en el robot

Preparación:

Pon una sartén pequeña al fuego sin nada de grasa. Deja que se caliente y añade las semillas de comino y de coriandro. Deja tostar, mientras remueves continuamente, hasta que desprendan aroma (tarda unos minutos, 3 o 4). Deja enfriar. Luego, pon todos los ingredientes en un robot y bate hasta que obtengas una pasta.

Pasta korma

Judías pintas refritas

Ya hay una receta de judías refritas en el blog, pero esta es muy distinta. Escribo un sábado, que es el día que tengo yo para estas cosas. He conducido mi coche nuevo por primera vez. He ido al Mercadona a la hora de comer, pensando que no había nadie. Craso error: estaba toda Mérida allí. He salido del Mercadona. No sé cómo, he acabado en la carretera de Alange, aunque yo quería ir a mi casa. He puesto quinta y a disfrutar del paisaje, que es bien bonito. He vuelto a Mérida. He ido al Carrefour. He comido ensalada y patatas en el McDonald’s. He cogido el coche y me he ido a Calamonte por la autovía. He salido como he podido por la autovía, pero no me ha pasado nada porque estoy escribiendo esto y estoy viva. He circulado por las calles de Calamonte, ciudad sin ley. He ido a Alange, he vuelto de Alange, estoy en mi casa y he aparcado como he podido. Casi se me olvida cerrar el coche.

Coche nuevo
Cochecito nuevo

Es más fácil de lo que pensaba… cuando consiga cogerle el punto al freno y al acelerador. Os juro que yo me iba a ir al polígono a practicar, pero no sé cómo, he acabado dando vueltas por los pueblos… El jueves tengo clases de autoescuela ya con mi coche.

También he aprendido a sacarlo y a meterlo del garaje. Con calma y con cuidado. Bueno, le di un poco a la pared, en plan coches de choque, pero no tiene ni un rasguño. Luego volví a Calamonte, con otro coche pegado a mi culo, porque debe de ser muy divertido pegarse al culo de alguien en una carretera en la que hay que ir a 80, cuando el otro va a 80 y hay dos líneas continuas que impiden adelantar. Debe de ser divertidísimo, oigan, pero yo no le veo el punto.

En Calamonte di vueltas por las calles, me metí dos veces en callejones sin salida, tuve que dar marcha atrás y hacer maniobras y mirar a ver si no atropellaba a un perrito que estaba saludándome por ahí… Y luego me fui a la manifestación del 1 de mayo. He decidido que los pueblos no me gustan porque la gente aparca donde le da la gana y te pita porque quieren pasar aunque sean ellos los que tienen el ceda el paso.

La práctica hace al maestro. Eso me repito siempre. Como en la cocina… Judías refritas de J.L. Fields.

Judías refritas
Judías refritas

Ingredientes para 8 raciones de las mías:

  • 200 gramos (1 taza) de alubias pintas puestas a remojo al menos 12 horas
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • 80 gramos (1/2 taza) de cebolla picada fina
  • 4 dientes de ajo muy picados
  • 1 o 2 jalapeños frescos sin semillas (aquí no venden, así que no le puse)
  • De 470 a 700 ml (de 2 a 3 tazas) de agua o caldo
  • 1 cucharadita de chile en polvo
  • 1/2 cucharadita de comino en polvo
  • 1/4 cucharadita de cayena
  • De 1/2 a 1 cucharadita de sal

Judías refritas
Judías refritas

Preparación:

Escurre y enjuaga las alubias.

Pulsa la función SAUTÉ (saltear) para calentar la olla y añade el aceite. Agrega el ajo, la cebolla y el jalapeño. Saltea 3 minutos, removiendo frecuentemente. Añade las alubias pintas y suficiente agua o caldo para cubrirlas unos dos dedos. Añade el chile, el comino y la cayena y remueve.

Lleva a ebullición y cocina de 6 a 10 minutos en HIGH. Deja que el vapor salga de forma natural.

Quita la tapa y escurre las alubias, pero reserva el líquido. Ponlas de nuevo en la olla y machácalas con un tenedor o un prensapatatas. Si las quieres más deshechas, añade una o dos cucharadas del líquido que has reservado. Ya las puedes usar con salsa pico de gallo y tortillas de maíz, con arroz, en ensalada o como quieras.

Judías pintas refritas

Hummus de edamame

¿Veis las vainas estas que hay al lado del hummus? ¿Eh?

Pues son enanas y hay que desgranarlas para hacer este hummus. El edamame tiene un sabor amargo, o al menos estas vainas pequeñas. No puedo decir si siempre su sabor es amargo cuando lo tomas crudo, porque yo solo he probado estos y luego otros pero ya cocidos y con salsa de soja en su misma vaina. El hummus de edamame está muy rico. Ahora mismo, no puedo dilucidar si está tan rico como que merezca la pena pasar dos horas de tu vida desgranando pacientemente esas vainas tan pequeñas. Mirad, voy a ser sincera: no las merece. Dos horas. Que sí, que te pones música y tal, pero aquí llevamos todo el mes de julio en alerta naranja por el calor y yo no puedo con mi cuerpo en verano, así que la próxima vez, las coceré con vaina (unos 20 minutos, aunque hay que estar probando desde los 10, según me dijo Gema) y creo que después será mucho más fácil desgranar. Y si no lo es, lo mismo bato con la vaina y tó.

Eso sí: si tenéis 5 o 6 hijos con la edad suficiente como para meterse en la cocina a desgranar, yo lo haría. La receta es de Isa does it, pero ella usa edamame congelado, que es como hay que hacer estas cosas: que alguien lo pele por ti.

Actualización:- Desde que escribí esto, venden hummus congelado y grande en supermercados, así que no hace falta ponerse a pelar edamame fresco, que es un dolor.

Ingredientes:

  • 2 dientes de ajo pelados y picados
  • 1 y 1/2 tazas (220 gramos) de edamame, desgranado. Si lo encontráis congelado sin vaina, adelante. Pero dejadlo descongelar antes toda la noche en el frigorífico.
  • 1/3 taza (80 ml) de agua
  • 1/4 taza (50 ml) de zumo de limón
  • 1/4 taza (60 gramos) de tahini
  • 1/4 taza (50 gramos) de aceite de oliva
  • 1/8 cucharadita de cayena (la receta pone wasabi en polvo, 1 cucharadita y 1/2, o menos, dependiendo del picor del wasabi. Yo al picante puedo darle poco, por la colitis ulcerosa, así que usé cayena, pero poca).
  • 1/2 cucharadita de sal

Preparación:

Desgrana el edamame con mucha música y mucha paciencia en esta vida. Ponlo en el bol del robot de cocina con el tahini, el ajo picado, el agua, el zumo de limón, el aceite de oliva, la cayena o el wasabi y la sal. Bate hasta que sea cremoso o déjalo como yo, con un poco de textura (depende de lo batido que te guste). Guárdalo en un tupper en el frigorífico hasta que te pongas a untarlo en tostadas como si lo fueran a prohibir.

Hummus de edamame

Alubias negras con mango

Cuando la hija de mi amiga Marta vio esta foto, dijo: «Mira, mamá: caca». Mi amigo Manolo me dijo que me dejara de planos cenitales. Otros me pasaron páginas de consejos para hacer buenas fotografías de comida, que están basadas, sobre todo, en una cantidad de tiempo que yo no tengo. Porque yo voy siempre a carajo sacao. Y además me canso. Es lo que hay. Yo me canso mucho y quiero descansar viendo Daredevil o House of cards. No pasándome tres horas colocando un atrezzo que no tengo. Porque mis trapos están todos guarros y son del Ikea y no sé cómo combinar los colores. Ya lo conté.

Las legumbres, además, a mí nunca me salen bien en las fotos. Y eso que el trozo de mango ese que se ve en el plato está lavado, ¿eh? Lavado bajo el grifo. Porque, si no, estaría marrón. El problema es que en el libro del que lo saqué, el de The Vegan Slow Cooker, la foto es maravillosa. Unas judías enterísimas, unos trozos de mango amarillos y jugosos… Pues bien: así no queda el plato. Ya está. La fotografía culinaria tiene muchos trucos: uno es que las legumbres se fotografíen medio crudas. Pero a mí lo que me interesa es que veáis cómo queda el plato hecho. Que no, no queda como para salivar, pero es que queda así. Qué se le va a hacer. Eso sí: de sabor está muy rico. Podría haber quedado más fotogénico si hubiera cocido arroz (no del todo, porque si no, tampoco sale bonito), hubiera puesto dos alubias mal contadas lavadas también bajo el grifo y un poco de mango al vapor… Pero no sería este plato. Eso sí: lo podéis servir con arroz.

Ingredientes para 7 raciones:

  • 3 dientes de ajo picados
  • 2 mangos
  • 315 gramos de alubias negras puestas a remojo toda la noche. Las puedes cocer antes de hacer la receta o no.
  • 1 taza (235 ml) de agua o caldo
  • 2 cucharadas de caldo vegetal en polvo si no usas caldo
  • 3 cucharadas de jengibre fresco rallado
  • 1 y 1/2 cucharaditas de pimentón
  • 2 cucharaditas de tomillo
  • 1/4 cucharadita de nuez moscada
  • 1/8 cucharadita de clavos de olor molidos
  • 1/8 cucharadita de pimienta de Jamaica
  • 1/8 cucharadita de chile en polvo o cayena
  • Sal
  • Pimienta negra

Preparación:

Pica el ajo. Corta el mango a cuadritos, pelado. Yo lo pelo con un pelador y luego lo corto.

Engrasa bien con aceite de oliva la base y las paredes de la olla. Añade todos los ingredientes y cocina en LOW de 6 a 8 horas, si ya tienes las alubias negras cocidas. Si no las tienes cocidas, tendrás que calcular: yo las tuve algo más de 10 horas. Pero depende de tus alubias. Prueba, ajusta la sazón y sirve con arroz integral cocido, como relleno de burritos, como guarnición de algún plato…

Alubias negras con mango

Bindi Bahji (okra masala)

Okra. Se llama de mil maneras. Quimbombó, quingombó, gombo, molondrón, ocra, bamia. La cultivan en las Huertas del Abrilongo, que es mi grupo de consumo y, hasta ahora, yo nunca la había probado, porque parece una especie de pimiento pequeño y, aunque lo he intentado con ahínco durante todos los años de mi vida, los pimientos y yo no nos llevamos bien. Tenía muchísima curiosidad, porque la he visto en mil recetas de gastronomías que me resultan muy atractivas, como la de Nueva Orleans o las de varios países africanos, con sus especias y sus sabores. Este es un plato indio que nos trae Terry Hope Romero en su Vegan Eats World, que es uno de los libros de cocina más voluptuosos que tengo. Y no, no sabe a pimiento y sí, creo que tengo una nueva verdura favorita. Es muy rica en vitamina K y manganeso, en ácido fólico y vitaminas del grupo B. 

Ingredientes para 3 raciones:

  • 450 gramos de okra
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 1 cucharadita de semillas de mostaza (la receta original dice negra; yo usé amarilla, porque negra no tengo)
  • 3 dientes de ajo, pelados y finamente picados
  • 1 cebolla grande, pelada y finamente picada
  • 2 cucharaditas de garam masala
  • 1 cucharadita de cúrcuma molida
  • 1/2 cucharadita de canela molida
  • 1/4 cucharadita de cayena molida (la receta original pide 1/2: ajustadla a vuestro gusto de picante)
  • 1 cucharadita de sal
  • De 2 a 4 cucharadas de caldo vegetal o de agua (yo usé agua)
  • 1 taza de tomate crudo, sin semillas y picado (2 tomates de pera)
  • 1 cucharada de zumo de lima (o de amchur, que es mango desecado y molido, que no tenía)

Preparación:

Lava las okras, quítale los tallos y córtalas en trozos no muy pequeños: observarás que algunas las puedes dejar completamente enteras.

Calienta el aceite en un wok o en una sartén grande a fuego alto. Agrega las semillas de mostaza, tapa el wok y dale unas pocas sacudidas. Una vez que las semillas comiencen a chisporrotear (saltan, como las palomitas), destapa el wok y agrega el ajo. Remueve unos 10 segundos y añade la cebolla. Déjala 3 minutos, removiendo, agrega la okra y déjala 2 minutos.

Ahora, espolvorea el garam masala, la canela, la cúrcuma, la cayena y la sal y saltea durante 2 minutos. Añade 2 cucharadas de agua y tapa el wok. Baja el fuego y ponlo a fuego medio-alto. Con el wok tapado, cocina la okra de 12 a 14 minutos. Destápalo de vez en cuando para remover y vuélvelo a tapar. Observa si se pega, porque si es así, tendrás que añadir más agua: no un chorro, sino 1 cucharada o 2, según veas. La okra es un poco babosilla, lo descubrirás cuando la cortes, pero una vez cocinada, verás que esa babosería se mengua un poco. No del todo, claro está, porque además la convierte en un vegetal genial para espesar platos, pero sí se reduce. La okra ya debería estar tierna después de estos 12 o 14 minutos, pero si no lo está, déjala un rato más. Eso sí: ten en cuenta que en el wok, la verdura se mantiene más crujiente que en la sartén.

Una vez esté hecha, destapa, añade el tomate y el zumo de lima (o el amchur, si es que lo tienes en casa) y remueve. Déjalo 2 minutos, removiendo frecuentemente. Quita del fuego, espolvorea con más garam masala, si quieres y sirve con pan o con arroz.

Bindi Bahji (okra masala)

Seitán en crock pot

descarga

Nunca había hecho seitán en la crock pot. De hecho, nunca he hecho seitán cocido, solo al vapor o al horno: en el blog tenéis muchas recetas. Tenía una slow cooker de 4 quarts cuando decidí comprar otra más pequeña (sí, quien la prueba, se enamora). ¿Por qué razón? Porque en la grande sale mucha cantidad. Y luego congelo. Todavía tengo que observar si necesito un congelador externo en mi casa nueva, porque estos meses de teatro han sido tan caóticos (y divertidos) que he cocinado lo mínimo imprescindible. Así que, con una olla lenta pequeña, puedo hacer recetas que me sirvan para la cena. La estrené con este seitán que escogí del libro Vegan Slow Cooking for Two or Just for You.

003 Italian seitan coins

Ingredientes para 6 raciones:

  • 700 mililitros de agua
  • 2 cubitos de caldo vegetal
  • 130 gramos de gluten
  • 1 cucharadita de albahaca seca
  • 1 cucharadita de tomillo seco
  • 1 cucharadita de mejorana seca
  • 1/2 cucharadita de pimienta
  • 1/2 cucharadita de cebolla en polvo
  • 1/4 cucharadita de cayena en polvo
  • 1/4 cucharadita de romero seco
  • 1/4 cucharadita de sal fina
  • 165 gramos de agua

001 Italian seitan coins

Preparación: 

Pon los 700 mililitros de agua y las dos pastillas de caldo en una olla lenta de 1.2 a 2 quarts y ponla en HIGH mientras preparas el seitán. Que no se te olvide la tapa.

En un robot de cocina, con el accesorio de amasar, pon el gluten y las hierbas y pulsa para que se integre. Añade la mitad del agua y amasa hasta que se absorba. Agrega luego la otra mitad del agua. Ten en cuenta que las distintas marcas de gluten absorben distintas cantidades de agua, así que ve observando: tiene que quedar una masa.

Pásala a la encimera y amasa durante cinco minutos. Deja reposar, para que el gluten se desarrolle. Corta la masa en ocho trozos, da forma de salchicha (bueno, a mí no me quedaron muy bien, la verdad) y, con un cuchillo afilado, córtala en rodajitas. Ponlo en la slow cooker y cuece en HIGH de 2 a 3 horas, hasta que veas que el gluten comienza a flotar. El mío comenzó a flotar a la hora y poco, pero yo lo dejé dos igualmente.

Guárdalo en la nevera (3 días) o congélalo con su caldo. Descongélalo en el frigorífico. No tires el caldo, que te servirá para hacer más seitán, o para risotto o para una sopa.

Seitán en crock pot

Berenjenas mogul

Esta es una salsa fuertecita para pasta, que está impresionantemente buena. Eso sí: el sabor fuerte se lo da el yogur, así que usad menos si no os gusta tanto. A mí me encantó tal cual está. La tomé del libro The gourmet vegetarian slow cooker. Yo la usé para unos macarrones de centeno integrales, pero creo que, como relleno de sándwiches o bocadillos, o con pan de pita, tiene que estar también buenísima… Mogul es un imperio del subcontinente indio, que existió hasta el siglo XIX.

Ingredientes para 5 raciones:

  • 1 cucharadita de semillas de comino
  • 6 clavos de olor enteros
  • 1 cucharada de jengibre fresco picado
  • 2 cucharaditas de ajo picado
  • 2 berenjenas pequeñas, peladas y cortadas en cubitos
  • 2 cucharaditas de garam masala
  • 1 cucharadita de cúrcuma molida
  • 1 cucharada de pimentón
  • 1/4 cucharadita de cayena (yo no le puse)
  • 800 gramos de tomates picados
  • 1/4 taza de cilantro fresco
  • 460 gramos de yogur de soja
  • 1 cucharadita de sal

Preparación:

En un molinillo de café o de especias, muele los clavos de olor y el comino hasta que sean polvo. Agrega el jengibre y el ajo y pícalos hasta que sea una pasta.

Pon la berenjena picada en la olla.

En un bol, mezcla la pasta de especias, el garam masala, los tomates, el pimentón, la cúrcuma y la cayena, si la usas. Ponlo encima de las berenjenas y remueve. Tapa y cocina en LOW durante 4 horas. La berenjena ha de quedar tierna.

Apaga la olla, quita la tapa y deja reposar 10 minutos. Agrega el yogur, remueve y añade cilantro fresco picado.

Berenjenas mogul

Sopa de lentejas

Sí, ha llegado el otoño. Ha llegado el otoño de una manera brutal. No por el tiempo, que está más o menos como todos los otoños (esto es, nunca sabe una qué ropa ponerse…) sino porque vino con gente nueva que llegó de golpe (a veces ocurren estas cosas) y porque trajo también noticias maravillosas. Noviembre siempre es bonito. Adiós, ensaladas. Hola, platos contundentes de cuchara. Bienvenidos, nuevos sabores. Y nuevos libros. Este es de Vicki’s Vegan Kitchen. Recetas facilitas, que siempre salen (adoro los libros americanos de cocina, con tanto detalle y tan profusamente explicados para torpes como yo). Y es mi primer plato de lentejas desde que, allá por aquellos tiempos del inicio de mi genial (léase con ironía) colitis ulcerosa, dejé de comerlas porque me moría de miedo si las veía…

Ingredientes para 4 personas.

  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cebolla grande pelada y picada
  • 4 hojas de laurel
  • 1 cucharadita de comino molido
  • 200 gramos (1 taza) de lentejas secas, enjuagadas y escurridas
  • 850 gramos (5 tazas) de agua o caldo vegetal sin sal
  • 2 cucharadas de vinagre balsámico de Módena
  • 2 cucharadas de salsa tamari
  • Una pizca de cayena (yo no le puse, porque es picante)
  • De 4 a 6 dientes de ajo picados

Preparación: 

Calienta una olla grandecita a fuego medio. Añade el aceite y deja que se caliente un ratito. Agrega la cebolla y el laurel y saltea, removiendo de vez en cuando, durante 10 minutos.

Ahora agrega el ajo y el comino y saltea, sin dejar de remover y siempre a fuego medio, de 2 a 3 minutos más.

Echa en la olla las lentejas, el agua o el caldo y el vinagre. Sube el fuego, tapa la olla, lleva a ebullición y, cuando hierva, baja el fuego. Ponlo a fuego medio-bajo (yo lo dejo en el número 3 de la vitrocerámica) y cuece hasta que estén tiernas. A ver: cada lenteja es un mundo. Las mías, que son pardinas, tardan más de media hora. Así que yo las tuve 30 minutos.

Antes de que finalice la cocción de las lentejas, cuando queden unos 10 minutos, agrega el tamari. ¿Cómo sabemos cuánto tiempo tardan las lentejas y cuándo tenemos que añadir el tamari? Pues yo no lo sé. Así que yo lo eché a la media hora. Luego, cuece unos 20 minutos más. Esto es lo que pone la receta: que una vez agregado el tamari, cozamos 20 minutos más. Yo no lo tuve tanto tiempo porque no quería que las lentejas se deshicieran, pero para estar hechas del todo necesitaron 45 minutos. Así que id probando, que seguro que habéis hecho más lentejas que yo…

Sopa de lentejas

Hummus del Candle 79 / Smoked Paprika Hummus

Sí, otra receta de hummus: creo que las probaré todas. Veredicto… Pues, aunque hayan sido los mismos miembros del Candle Cafe los que montaron el Candle 79 en Nueva York, lo cierto es que el hummus del Candle Cafe está mucho más rico. Aquí prescinden del comino, que yo creo que es fundamental. Pero, para la gente a la que no le guste el comino, aquí tiene una buena opción. El crítico del New York Times, Frank Bruni, dijo que era uno de los mejores hummus de la ciudad. Mi veredicto es que el Bruni tiene el gusto en el culo. No está malo, pero es un hummus wanna be. I wanna be like my older brother. O algo así.

Smoked Paprika hummus del libro Candle 79 Cookbook.

Para unas 3 tazas (680 gramos)

Ingredientes:

  • 1 taza de garbanzos secos (190 gramos de garbanzos ecológicos pequeños) o 2 botes de 400 gramos de garbanzos cocidos, escurridos y enjuagados. Los garbanzos secos, una vez cocidos, son 475 gramos.
  • 2 dientes de ajo grandes picados
  • 1 cucharadita de zumo de limón recién exprimido
  • ¼ cucharadita de pimienta de cayena
  • 2 cucharaditas de pimentón ahumado dulce, más algo más para decorar
  • ½ cucharadita de sal marina (puse algo más de sal porque queda soso)
  • ½ cucharadita de pimienta negra (puse ¼ cucharadita)
  • 2 cucharadas de perejil picado
  • 1/3 taza de aceite de oliva (65 gramos), más algo más para guarnecer
  • 1/3 taza de tahini (80 gramos)
  • Guarniciones opcionales: pimientos rojos asados, ajo asado al horno, rodajas de limón, aceitunas, menta…

Preparación:

Si usas garbanzos secos, ponlos en un bol y añade agua fría hasta que los cubras unos 5 cm. Mantenlos en el refrigerador toda la noche. Escurre y enjuaga. Ponlos en una olla y añade agua fría hasta cubrirlos nuevamente otros 5 cm. Lleva a ebullición y, cuando hierva, baja el fuego, tapa la olla y deja cocer 50 o 60 minutos, hasta que estén tiernos. Esto varía, la verdad. En algunos paquetes pone 2 horas, así que tendrás que hacer caso a lo que digan. En una olla rápida se hacen en menos tiempo. Escúrrelos y deja enfriar, pero reserva de ¼ a ½ taza del líquido de cocción.

Mezcla los garbanzos, el ajo, el zumo de limón, la cayena, la paprika, la sal, la pimienta, el perejil, el aceite de oliva y el tahini en un bol y mezcla bien. Pasa la mezcla a un procesador de alimentos y bate hasta que esté bien mezclado. Añade ¼ de taza del líquido de cocción. Si usas garbanzos cocidos, puedes añadir agua o caldo vegetal, lo que prefieras. Según te guste la consistencia, puedes agregar más líquido a la mezcla. Tiene que quedar suave, pero densa. Raspa las paredes del vaso de la batidora o del bol del procesador si ves que no se bate bien, para integrarlo todo. Tápalo y refrigera al menos una hora.

Aguanta tres días en el frigorífico. Pero, cuando lo vayas a servir, sácalo un rato antes para que esté a temperatura ambiente.

Ojo: yo lo congelo. Y queda maravilloso, una vez descongelado, por cierto.

Para servir, agrega un chorrito de aceite y más pimentón y sirve con la guarnición que desees y con pan de pita para que los comensales lo puedan untar.

Hummus del Candle 79 / Smoked Paprika Hummus